MUÑOÑES

Estos días, mucha de la gente que trabaja aquí habrá recibido un video realizado por Michelin en Valladolid.

En él se narra como un trabajador se amputa las manos en un accidente laboral, e intenta conseguir una gracia que no tiene, quedando todo muy grotesco.

Este video se difunde por parte de la empresa cuando aún se está investigando la trágica muerte de un compañero, que trabajaba para Michelin, en un accidente laboral en Almería, cero “gracioso” el tema.

También es casi coincidente en el tiempo esta difusión con la reciente pérdida de un dedo de uno de nuestros compañeros en Valladolid, muy “gracioso” también.

Seis muertes reconocidas en menos de diez años en Michelin hacen cuanto menos poca gracia.

En ese video, una vez más se culpabiliza al trabajador de su propio percance. Es la técnica empleada siempre por parte de la marca francesa en España, mirar hacia otro lado y echar la culpa al muerto o al accidentado.

No estaría mal ver un video en el que la responsable del servicio médico salga negándose a dar la baja tras un accidente, o negar el parte de asistencia tras un percance. O uno donde se vea algún compañer@ por el taller con un dedo escayolado, con la espalda o cervicales doloridas o cojeando, para así no declarar un accidente.

¿O que tal ese video en el que se vean las posturas y los ritmos que se soportan para lograr los 800 puntos? U otro de la gente yendo al Fisio para recuperar un poco las contracturas que se generan currando aquí.

¿Dónde ese video pedagógico en el que la empresa enseñe a su personal que está trabajando en una empresa química donde hay sustancias tan peligrosas como el amianto, el heptano o el formaldehido por ejemplo? Esa muerte silenciosa provocada por cánceres contraídos por estas sustancias que respiramos a diario ¿no le preocupan?.

Valladolid a 17 de abril de 2019